Bahía de Kino es una comunidad costera que tradicionalmente extrae bivalvos, como el callo de hacha Atrina tuberculosa y la almeja arrocera Chionista fluctifraga. Debido al deterioro de los bancos pesqueros, ha dificultado satisfacer la demanda comercial. Pescadores y pecadoras implementaron un sistema integrador de maricultura comunitaria denominada Zona de Manejo Integral (ZMI), con tres componentes: (1) zona de refugio, donde no se extraen recursos, (2) zona de maricultivo, donde se llevan a cabo las actividades de prengorda y colecta de semillas, y (3) zona de restauración y aprovechamiento por cuotas, donde se siembran juveniles hasta su talla comercial.
Dos cooperativas pesqueras, Eco Pescadores con A. tuberculosa desde 2014 y Mujeres del Mar de Cortés con C. fluctifraga desde 2018, y el apoyo de Comunidad y Biodiversidad, diseñaron una ZMI en polígonos de 25.9 y 7 ha respectivamente.
Las semillas de A. tuberculosa se colectaron del medio natural con bolsas de malla Netlon capturando entre 50 a 1,500 org anuales, mientras que un promedio de 350,000 semillas de C. fluctifraga provienen anualmente de un laboratorio local.
Ambas cooperativas hicieron monitoreos anuales para estimar la abundancia. A. tuberculosa se monitoreó a través de transectos submarinos de 30x2 m, para C. fluctifraga se utilizaron cuadrantes aleatorios de 1m2.
Por la limitada producción de semillas de A. tuberculosa en laboratorio, de 2014 a 2016 se desarrolló la técnica de colecta y siembra. En 2014 la abundancia fue de 54 org/ha, para 2024 se calcularon 398 org/ha (fig.1), incrementando un 637%. En 2022 se implementó un FIP (9407). Para C. fluctifraga se calculó en 2018 una disponibilidad de 4,500 org/ha y en 2024 hasta 210,000 org/ha (fig.1), basado en la abundancia se definen las cuotas.
Los resultados demuestran que el maricultivo de especies nativas aumenta la producción y permite un sobreprecio en venta del 15 a 40% sobre la pesca comercial. Integra la participación de mujeres y juventudes en la red de valor, fortalece el manejo comunitario, permite diversificar la pesca tradicional y recuperar pesquerías sobreexplotadas.